Como pretexto por la Feria Ornitológica (complemento a la Tercera edición de la Feria Gastronómica), las cigüeñas no han marchado a los tópicos de París y se han adelantado este otoño a sus refranes; ya el día de Todos los Santos podían verse sobrevolando el arroyo del Guadalmazán y reposando en sus nidos por el cruce en dirección a El Arrecife que conduce al departamento carloteño de El Rinconcillo.
El cambio en su conducta migratoria permaneciendo en nuestra geografía, antes iban a África, puede achacarse al cambio climático, a los nuevos hábitos alimenticios o simplemente al entorno de la campiña carloteña; sin embargo no hay duda, que el paraje del municipio de La Carlota varía gratamente con su presencia, encumbrando las torres de la iglesia de la Inmaculada Concepción.