La obra que conectaba la redonda de la Fuente Nueva y 28 de Febrero ha quedado abierta con el tramo terminado de ésta última con la redonda de Ramón y Cajal. Antes de iniciarse el lavado de cara era una calle con el asfalto desgastado, acerado sin adoquines ni apenas bordillo en algunos puntos, ni rampas de cochera improvisadas, los correspondientes socavones y piedras en otros.
En cambio, en la actualidad se ha convertido en una vía moderna y homogénea que embellece el acceso al cementerio municipal desde la avenida Carlos III y queda afianzada con la calle La Estación como dos líneas importantes por su situación estratégica. Dando buen uso del Fondo Estatal para el empleo y la sostenibilidad local por parte del Ayuntamiento para la protección del casco histórico de La Carlota.